
El embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson, reiteró el compromiso de su país para desmantelar a los cárteles del narcotráfico. Su declaración se dio tras el anuncio de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), que aplicó sanciones contra la facción “Los Mayos” del Cártel de Sinaloa.
“Las sanciones de hoy reflejan nuestra determinación compartida con México para detener sus operaciones en cada una de sus etapas. La justicia prevalecerá”, señaló Johnson en su cuenta en X.
Empresas y operadores bajo sanción
La OFAC designó a cinco personas y 15 empresas ligadas a la red financiera de “Los Mayos”, con presencia en el norte de México. Además, incluyó al líder de un grupo criminal afiliado al Cártel de Sinaloa especializado en la producción de fentanilo.
De acuerdo con el subsecretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, John K. Hurley, el cártel “sigue traficando narcóticos, lavando dinero y corrompiendo a funcionarios locales”.
México entrega a 26 miembros del crimen organizado
En paralelo, el Gobierno de México confirmó la entrega a Estados Unidos de 26 integrantes de organizaciones criminales, entre ellos varios líderes del Cártel de Sinaloa.
La presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que la medida respondió a una decisión soberana en materia de seguridad nacional, no a una petición directa de Washington.
Sin embargo, la versión oficial contrasta con lo informado por la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), que señalaron que la operación se realizó “bajo solicitud” del Departamento de Justicia estadounidense.
Marco legal y compromisos de Estados Unidos
Las autoridades mexicanas sostuvieron que la entrega se realizó bajo la Ley de Seguridad Nacional, argumentando que los reclusos representaban un riesgo permanente para la seguridad pública.
Washington, por su parte, se comprometió a no aplicar la pena de muerte a los acusados, aunque sí podrían enfrentar condenas de cadena perpetua.
