El nivel alto de azúcar en la sangre, o hiperglucemia, es un problema frecuente, especialmente en personas con diabetes, y suele manifestarse en las primeras horas del día. Según la Mayo Clinic, uno de los efectos iniciales de la hiperglucemia es que el exceso de azúcar pasa a la orina, lo que provoca una pérdida de agua considerable y, a su vez, deshidratación.
¿Cuáles son los niveles normales de glucosa en la sangre?
De acuerdo con el portal Medline Plus, los niveles normales de glucosa en sangre en adultos varían entre 90 y 130 mg/dL antes de las comidas y no deben superar los 180 mg/dL después de comer. Si los niveles de azúcar se mantienen entre 120 y 160 mg/dL de forma constante, es fundamental consultar a un médico para evitar daños graves a largo plazo.
Señales de alerta de azúcar alta al despertar
El portal Health Site destaca cinco señales principales que pueden indicar niveles elevados de azúcar en sangre al despertar:
- Visión borrosa: Los altos niveles de glucosa afectan la vista, provocando una visión poco clara al levantarse.
- Sed excesiva: Despertar con una sensación persistente de sed indica que el cuerpo trata de compensar la deshidratación causada por el exceso de glucosa.
- Necesidad frecuente de orinar: Los riñones intentan eliminar el azúcar sobrante a través de la orina, generando ganas constantes de ir al baño.
- Fatiga y debilidad: A pesar de ser la principal fuente de energía, la glucosa no se procesa correctamente en personas con hiperglucemia, lo que causa cansancio al despertar.
- Dificultad para concentrarse: Los niveles elevados de azúcar impactan el rendimiento cognitivo, dificultando la concentración durante las primeras horas del día.
Otros síntomas que indican azúcar alta
Además de estos síntomas, pueden presentarse dolores de cabeza, parches de piel oscura, hormigueo en manos o pies, e incluso infecciones recurrentes. Estas señales de alarma requieren atención médica para prevenir complicaciones graves.
¿Cómo controlar los niveles de azúcar en la sangre?
El control adecuado de la diabetes y la regulación de los niveles de glucosa son esenciales para evitar complicaciones. En algunos casos, ajustar la medicación, la dosis de insulina o revisar la alimentación antes de dormir puede ayudar a reducir los niveles de azúcar al despertar y mejorar el bienestar general.
Fuente: El Universal