Un grupo de investigadores ha desarrollado una prueba genética no invasiva que podría transformar la forma en que se diagnostica el melanoma, el tipo más agresivo de cáncer de piel. Esta herramienta permitiría evitar la biopsia tradicional en determinados pacientes, reduciendo molestias, costos y tiempos de espera.
El melanoma se origina en los melanocitos, las células encargadas de producir el pigmento de la piel. Su detección temprana es crucial para el éxito del tratamiento, pero hasta ahora la biopsia era el único método seguro para confirmar la presencia de células malignas.
Una prueba basada en la genética del paciente
El nuevo enfoque se centra en el análisis de biomarcadores específicos presentes en el ADN de las células cutáneas. Mediante el estudio de la expresión de genes asociados al crecimiento anormal, los especialistas pueden determinar si una lesión es benigna o sospechosa con una precisión cercana al 95 %, según los resultados del estudio.
Este nivel de efectividad representa un avance significativo, ya que podría disminuir el número de biopsias innecesarias y ofrecer una alternativa rápida y confiable para la detección del cáncer de piel.
Resultados alentadores y una técnica accesible
A diferencia de los procedimientos tradicionales, esta prueba puede realizarse a partir de una pequeña muestra de piel o incluso de células recolectadas con un hisopo, lo que elimina la necesidad de cortar tejido. Además, su aplicación resulta económica y accesible, lo que abre la posibilidad de implementarla en clínicas dermatológicas y hospitales públicos.
De acuerdo con los investigadores, cuando la prueba genética arroja un resultado negativo, los médicos pueden descartar con alta seguridad la presencia de melanoma, lo que se traduce en menos intervenciones y una menor carga emocional para el paciente.
Medicina de precisión: el futuro del diagnóstico oncológico
Este desarrollo forma parte de la tendencia creciente hacia la medicina personalizada o de precisión, que adapta los tratamientos y diagnósticos a las características genéticas de cada individuo. Los especialistas destacan que esta innovación no solo mejora la exactitud del diagnóstico, sino que también reduce la ansiedad asociada a la espera de los resultados.
La prueba representa un paso hacia un modelo de atención más humano y eficiente, donde el paciente recibe un diagnóstico confiable sin someterse a procedimientos dolorosos.
No sustituye totalmente la biopsia
Pese a sus beneficios, los expertos aclaran que esta tecnología no reemplazará por completo la biopsia. En los casos donde el resultado genético sea positivo o poco concluyente, el análisis de tejido sigue siendo necesario para confirmar el diagnóstico y evaluar el grado de avance del melanoma.
Sin embargo, la posibilidad de descartar casos benignos sin recurrir a la biopsia marca un cambio significativo en la práctica dermatológica, reduciendo la saturación de laboratorios y acelerando los procesos de atención médica.
Un paso esperanzador contra el cáncer de piel
Si los ensayos clínicos a gran escala confirman su efectividad, esta prueba podría comenzar a utilizarse en los próximos años, representando una de las innovaciones más importantes en la detección temprana del melanoma.
El hallazgo refuerza la idea de que la genética será una herramienta central en la prevención y diagnóstico del cáncer, ofreciendo una alternativa más segura y cómoda para millones de pacientes en el mundo.
Fuente: EFE
