El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó que la reciente masacre en La Concordia, Chiapas, que dejó un saldo de 19 muertos, se debe a una disputa entre bandas del crimen organizado involucradas en el tráfico de drogas y migrantes. La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana informó que las víctimas, algunas de ellas originarias de Guatemala, fueron halladas en un camión abandonado. En respuesta, el gobierno ha desplegado 200 agentes para reforzar la seguridad en la región fronteriza.
El presidente explicó que este trágico suceso es consecuencia de la lucha por el control de rutas y territorios utilizados para el tráfico ilegal. La violencia en la zona ha aumentado debido a la presencia de cárteles que compiten por estas actividades ilícitas. Las autoridades están trabajando para desmantelar estas redes y proteger a las comunidades afectadas.
La situación en Chiapas ha generado preocupación tanto a nivel nacional como internacional, ya que involucra a migrantes que buscan llegar a Estados Unidos a través de México. El gobierno mexicano ha reiterado su compromiso de combatir el crimen organizado y garantizar la seguridad de sus ciudadanos y de los migrantes que transitan por el país.
