Carlos Slim, considerado uno de los empresarios más influyentes del mundo, ha reavivado el debate sobre la jornada laboral con una propuesta que busca transformar la manera en que se trabaja. Durante la XXVIII Reunión del Plenario de la Fundación Círculo Montevideo, Slim sugirió implementar una semana laboral de 36 horas, distribuidas en tres días con turnos de 12 horas cada uno, además de retrasar la edad de jubilación hasta los 75 años.
Slim argumenta que su propuesta mejoraría la productividad de las empresas mediante el uso de tecnología avanzada, como la inteligencia artificial. Según su visión, trabajar más horas en menos días permitiría optimizar tanto los recursos tecnológicos como humanos, ofreciendo a los empleados cuatro días libres por semana.
Jubilación a los 75 años
Además de la reducción de días laborales, Slim plantea la necesidad de aumentar la edad de jubilación, pasando de los actuales 60-65 años a 75 años. Para Slim, el incremento en la esperanza de vida justifica que las personas permanezcan activas durante más tiempo, lo que podría aliviar la presión sobre los sistemas de pensiones.
“Vivimos más años, por lo que es necesario evitar que la jubilación ocurra tan temprano”, comentó el empresario.
Impacto en la productividad
A pesar de que la propuesta de Slim ofrece más días de descanso, trabajar jornadas de 12 horas puede tener efectos negativos en la salud física y mental de los empleados. Estudios recientes sugieren que las jornadas prolongadas pueden generar agotamiento y disminuir la calidad del trabajo, lo que podría afectar la productividad.
Algunos países como Alemania y Noruega, que han reducido las horas laborales, han logrado mejorar su productividad, mientras que en lugares con jornadas extensas, se ha observado una mayor fatiga y estrés en los trabajadores.
Desafíos para los trabajadores mayores
La prolongación de la vida laboral hasta los 75 años también plantea interrogantes. A medida que las personas envejecen, su capacidad física y cognitiva tiende a disminuir, lo que podría repercutir en su rendimiento. Informes como el del Banco de España señalan que la productividad tiende a bajar a partir de los 55 años, lo que pone en duda la viabilidad de prolongar la vida laboral en algunos sectores.
Además, existen trabajos que requieren un esfuerzo físico significativo, lo que podría ser complicado para los trabajadores de mayor edad, generando desigualdades en el mercado laboral.
Una propuesta con ventajas y desafíos
Aunque la propuesta de Slim ofrece beneficios atractivos, como más días libres y una mayor eficiencia empresarial, también enfrenta críticas. La idea de retrasar la jubilación y trabajar jornadas tan largas puede parecer desalentadora para muchas personas. En un contexto de cambio tecnológico constante, la propuesta de Slim podría influir en el futuro del trabajo, pero aún es incierto si será viable a largo plazo.
Fuente: El Imparcial
