Progreso, Yucatán.- Tras el paso del huracán Beryl, los habitantes de Progreso se reunieron en la estatua de Poseidón para celebrar su fortuna y rendir homenaje en un gesto de agradecimiento y humor.
Pilar, una ciudadana progreseña, lideró la iniciativa al colocar una ofrenda decorada con globos y bizcochos en la estatua de Poseidón. Este acto simboliza el agradecimiento de la comunidad por haber sido librados de la furia del huracán Beryl, que, afortunadamente, no causó mayores daños en la región.
La escena se convirtió en un símbolo de esperanza y gratitud, destacando el ingenio y el espíritu resiliente de los progreseños. La ofrenda a Poseidón, el dios del mar en la mitología griega, refleja una tradición cultural en la que se busca la protección y el favor de las fuerzas naturales.
La comunidad de Progreso sigue demostrando su capacidad para unirse y enfrentar los desafíos climáticos con optimismo y gratitud. Este acto, cargado de simbolismo, es una muestra más de la fortaleza y solidaridad que caracteriza a los yucatecos.
