Morelos, México – 2 de mayo de 2024 – En el caso del obispo emérito de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, el gobierno de Morelos ha negado que haya sido secuestrado, afirmando que cámaras de seguridad muestran que ingresó al motel Real Ocotepec a pie, junto a otro hombre.
La versión del comisionado estatal de Seguridad Pública de Morelos, José Ortiz Guarneros, choca con la del fiscal general Uriel Carmona. Ortiz Guarneros afirmó que “hasta donde sabemos, entró voluntariamente al motel con una persona del mismo sexo y esa persona después se retiró“, mientras que Carmona había mencionado que Rangel fue víctima de un secuestro exprés.
El obispo emérito estuvo desaparecido desde el sábado 27 de abril y fue localizado con vida el lunes 29, encontrándose hospitalizado. El abogado de Rangel, Pedro Martínez Bello, acusó que fue drogado y que le vaciaron sus cuentas bancarias.
La Policía filtró que Rangel fue encontrado en el motel con pastillas de viagra y un examen toxicológico arrojó que habría consumido benzodiacepina, un medicamento psicotrópico utilizado para efectos sedantes o ansiolíticos.