Oxxo, la cadena de tiendas de conveniencia más grande de México, está dando un giro significativo en su modelo de operación. Si bien los cajeros físicos seguirán siendo parte de la experiencia, Oxxo busca reducir su plantilla laboral a nivel nacional en un 50% mediante la introducción de máquinas de autocobro.
Este paso hacia la modernización pretende agilizar el proceso de pago y brindar una experiencia más eficiente a los clientes. Los módulos de autocobro se están instalando en algunos establecimientos piloto, como el Oxxo de La Florida, ubicado en la Gran Avenida en Yucatán. Está previsto que esta iniciativa se expanda pronto a otros lugares, incluido Quintana Roo.
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La introducción de máquinas de autocobro busca eliminar problemas recurrentes como la falta de sistema en los cajeros, proporcionando una solución que permitirá a los clientes realizar sus compras de manera más rápida y eficiente. Aunque esta medida implica una reducción en la plantilla laboral, Oxxo busca mantener una presencia de cajeros físicos para atender las necesidades de aquellos clientes que prefieren un servicio más tradicional.
Este cambio en las operaciones de Oxxo refleja una tendencia creciente en la industria minorista hacia la automatización y la modernización de los procesos para adaptarse a las expectativas cambiantes de los consumidores. La expansión de los módulos de autocobro a nivel nacional será seguida con interés por los actores de la industria minorista y los consumidores por igual.
