Joaquín Guzmán López, uno de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, y Ismael “El Mayo” Zambada, líder y cofundador del Cártel de Sinaloa, fueron detenidos en El Paso, Texas, confirmaron a MILENIO fuentes diplomáticas.
Esta captura se produce tras los recientes golpes de la SEDENA, la Guardia Nacional y el Centro Nacional de Inteligencia al Cártel de Sinaloa, como la detención de Ovidio Guzmán “El Ratón”, Néstor Isidro Pérez Salas “El Nini”, Gilberto Martínez Rentería “50”, Rey David Santiago Vargas “El Oso”, y el abatimiento de Raúl Carrasco Lechuga “Chore”, entre otros.
Operativos en el triángulo dorado, donde Aureliano Guzmán Loera “El Guano” mantiene presencia, han intensificado la presión sobre los miembros del cártel debido a la intervención de las fuerzas militares y la Guardia Nacional.
Zambada García era uno de los principales objetivos tanto de las autoridades mexicanas como estadounidenses. Como líder de una facción del Cártel de Sinaloa, su captura representa un gran golpe a una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo. Esta facción disputa el control del cártel con “Los Chapitos” o “Los Menores”. El gobierno de Estados Unidos ofrecía una recompensa de 20 millones de dólares por información que llevara a su captura.
Por Joaquín Guzmán López “El Güero”, las autoridades estadounidenses ofrecían una recompensa de 5 millones de dólares. Los hermanos Guzmán López iniciaron sus carreras en el narcotráfico a temprana edad, heredando relaciones y operaciones de su hermano fallecido, Edgar Guzmán López.
Tras la muerte de Edgar, Ovidio y Joaquín heredaron significativas ganancias del narcotráfico, invirtiendo grandes sumas en la compra de marihuana en México y cocaína en Colombia. Además, comenzaron a adquirir grandes cantidades de efedrina de Argentina, organizando su contrabando hacia México para la producción de metanfetamina.
Actualmente, los hermanos Guzmán López supervisan alrededor de 11 laboratorios de metanfetamina en el estado de Sinaloa, con una producción estimada de entre 3,000 y 5,000 libras de metanfetamina al mes. Este producto es vendido al por mayor a otros miembros del cártel y a distribuidores en Estados Unidos y Canadá.
El 2 de abril de 2018, ambos hermanos fueron acusados formalmente por un gran jurado federal en el Distrito de Columbia por conspiración para distribuir más de 5 kilos de cocaína, 500 gramos de metanfetamina y 1,000 kilos de marihuana, según las Secciones 959(a), 960 y 963 del Código Penal de Estados Unidos.