Una mujer de 55 años, residente en Trieste (norte) y afectada por esclerosis múltiple secundaria progresiva, falleció el 28 de noviembre en su domicilio tras autoadministrarse un fármaco letal.
Este caso marca un hito al ser la primera persona en Italia que ha sido asistida completamente por el Sistema Sanitario público italiano.
TE RECOMENDAMOS: Alerta sísmica: ¿Cuánto tiempo tienes para protegerte de un sismo?
La asociación Luca Coscioni, defensora del derecho a morir voluntariamente, anunció este suceso, destacando que es la primera persona en acceder al suicidio asistido con la directa asistencia del Servicio Sanitario. Esta mujer se convierte en la tercera persona respaldada por la asociación que opta por la muerte voluntaria asistida en Italia y la quinta a la que se le ha otorgado la aprobación.
Tras la orden del Tribunal de Trieste, la asociación explicó que el medicamento letal y el material fueron proporcionados por la Sanidad pública italiana, y se facilitó un médico que, de manera voluntaria, respaldó la solicitud dentro de los límites establecidos por la Justicia. No intervino directamente en la administración del fármaco, responsabilidad que continuó siendo exclusiva de la mujer.
TE RECOMENDAMOS: NASA: Viaja por el universo con el calendario 2024
En el mensaje que dejó registrado, la paciente, identificada como “Anna”, expresó su agradecimiento a quienes la ayudaron a cumplir su deseo, a su familia que estuvo a su lado hasta el final, y declaró su sensación de liberación.
Anna pudo acceder al suicidio voluntario después de que los médicos determinaran que su asistencia continua era vital y que su dependencia mecánica estaba garantizada por el uso de soporte ventilatorio durante las horas de sueño nocturno.