El teff, un grano ancestral, no solo nutre, sino que también fortalece el cuerpo gracias a su abundancia en proteínas, fibra y minerales. Con más de 5,500 años de historia, este cereal ha sido fundamental en la dieta etíope, especialmente en la preparación del injera, un pan plano y esponjoso esencial en las comidas de Etiopía.
¿Por qué es tan fácil cultivar el teff?
El teff ha demostrado una notable resistencia a condiciones climáticas adversas, incluyendo sequías, lo que lo ha convertido en un alimento indispensable para la supervivencia de las comunidades agrícolas etíopes durante siglos. Originario de las tierras altas del cuerno de África, este cereal ha sido crucial tanto en la subsistencia diaria como en rituales y festividades, acompañando el desarrollo de las civilizaciones en la región.
¿Qué beneficios ofrece el teff?
El teff ha ganado reconocimiento mundial recientemente, especialmente con la expansión de dietas sin gluten y la búsqueda de superalimentos. Este grano ofrece numerosos beneficios para la salud, destacándose su contenido proteico, según María Anunciación Pérez Bartolomé, ingeniera agrónoma y licenciada en Ciencia y Tecnología de los Alimentos. Además, posee las siguientes propiedades:
Libre de gluten: Ideal para personas con enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten, proporcionando una alternativa nutritiva a los cereales convencionales.
Rico en fibra: Su alto contenido de fibra mejora el tránsito intestinal y promueve una digestión saludable, además de funcionar como prebiótico, estimulando la flora intestinal.
Control del azúcar en sangre: Los hidratos de carbono complejos en el teff se liberan lentamente en el torrente sanguíneo, estabilizando los niveles de azúcar, beneficioso para personas con diabetes.
Alto contenido de calcio y hierro: Contribuye a la salud ósea y a prevenir la anemia, siendo especialmente beneficioso para mujeres embarazadas, niños en crecimiento y personas con altas necesidades de estos minerales.
Fuente de aminoácidos esenciales: Contiene ocho aminoácidos esenciales, incluyendo la lisina, crucial para el metabolismo del calcio y el crecimiento muscular.
Energía sostenida para deportistas: Debido a la liberación lenta de sus carbohidratos, proporciona energía prolongada, ideal para atletas y personas con altos requerimientos físicos.
Propiedades antioxidantes: Los antioxidantes presentes en el teff ayudan a combatir el daño celular, reduciendo el riesgo de enfermedades crónicas y promoviendo un envejecimiento saludable.
Beneficios cardiovasculares: Su consumo regular puede ayudar a reducir los niveles de colesterol y mejorar la salud cardiovascular, gracias a su contenido de fibra y nutrientes esenciales.
¿Cómo se consume el teff?
El teff es extremadamente versátil en la cocina. En Etiopía, se utiliza principalmente para hacer injera, pero fuera de su país de origen, su uso se ha diversificado. Puede consumirse en forma de harina para hacer panes, galletas y pasteles libres de gluten; también se puede utilizar en sopas, guisos y como espesante en salsas debido a su alto contenido de almidón. Además, el grano entero se puede cocer y utilizar como base en ensaladas y otros platillos.