Los pronósticos climáticos más recientes apuntan hacia una transición hacia el ENSO-neutral durante la primavera de 2024, con la posibilidad de que “La Niña” se desarrolle durante el verano del mismo año.
Aunque los pronósticos realizados durante la primavera tienden a ser menos confiables, existe una tendencia histórica que sugiere que “La Niña” sigue a eventos fuertes de “El Niño”.
TE RECOMENDAMOS: Chofer pierde la vida al defender a una mujer de un acosador en un autobús (VIDEO)
El equipo de pronosticadores coincide con los modelos más recientes, aunque existe cierta incertidumbre sobre el momento en que se producirá la transición a ENSO-neutral, seguido de un posible desarrollo de “La Niña”, según informa el Centro de Predicciones Climáticas del National Weather Service de NOAA.
En resumen, se espera que la transición de “El Niño” a ENSO-neutral sea probable para abril-junio, con un 79% de probabilidad, seguido de un aumento en la probabilidad de desarrollo de “La Niña” para junio-agosto de 2024, con un 55% de probabilidad.
La Organización Meteorológica Mundial explica que “La Niña” es un fenómeno que conlleva un enfriamiento a gran escala de las aguas de la superficie oceánica en el Pacífico ecuatorial central y oriental, así como otros cambios en la circulación atmosférica tropical, incluyendo los vientos, la presión y las precipitaciones.
TE RECOMENDAMOS: Alertan por bacteria Burkholderia Melioidosis: ¿Qué es y cómo se transmite? Reportan 4 fallecimientos
Por lo general, los efectos de “La Niña” en el clima son opuestos a los de “El Niño”, que representa la fase cálida del fenómeno ENOS.
Aunque “La Niña” es un fenómeno natural, está ocurriendo en un contexto de cambio climático inducido por la actividad humana, lo que ha aumentado las temperaturas a nivel mundial, intensificado los fenómenos meteorológicos extremos y alterado la distribución de las precipitaciones estacionales.