En Perú, una madre preocupada llevó a su bebé de 10 meses al hospital después de que la niña se tragara un crucifijo que quedó atascado en su garganta, sorprendiendo a los médicos al revisar las radiografías del incidente.
Las imágenes de rayos X revelaron el crucifijo bloqueando el esófago de la bebé, lo que requería una extracción urgente. Los médicos llevaron a cabo una exitosa endoscopia para retirar el objeto extraño del cuerpo de la pequeña, quien ahora se encuentra en buen estado de salud.
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Maricarmen Sajami Rosas, la madre de la niña, explicó que notó que su bebé estaba incómoda, lo que la llevó al hospital, donde los médicos identificaron el problema mediante radiografías.
¿Cómo prevenir la asfixia en bebés?
La asfixia en bebés menores de un año es común, ya que están en una fase de exploración donde tienden a llevarse objetos pequeños a la boca, lo que podría resultar peligroso.
Para prevenir estos accidentes por asfixia en bebés, es crucial evitar darles globos o juguetes con piezas pequeñas que puedan desprenderse. Se debe mantener a los niños menores de tres años alejados de botones, palomitas de maíz, monedas, uvas, nueces o cualquier otro objeto pequeño.
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Es esencial mantenerse alerta con los bebés, especialmente cuando empiezan a caminar o gatear.
Síntomas de asfixia en bebés
Los síntomas de un episodio de asfixia incluyen que la piel del bebé se torne azul, dificultad para respirar, incapacidad para emitir sonidos o llorar, tos ineficaz y débil, y en casos extremos, pérdida del conocimiento. Ante estos síntomas, es necesario llamar a los servicios de emergencia y aplicar primeros auxilios.