La presentación de la declaración anual en ceros implica que al finalizar el año fiscal, el contribuyente presenta un formulario indicando que no ha tenido ingresos ni deducciones durante ese periodo. Este proceso es aplicable para aquellos individuos que no han percibido ingresos ni realizado deducciones a lo largo del año fiscal en cuestión.
El propósito de la declaración anual es que los contribuyentes informen sobre su situación financiera y cumplan con sus obligaciones fiscales ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT). Al presentarla en ceros, se proporciona esta información tributaria. Sin embargo, esta acción puede conllevar ciertos riesgos.
Entre los riesgos de presentar una declaración en ceros ante el SAT se encuentran:
- Cancelación temporal del Certificado de Sello Digital (CSD): El SAT puede suspender temporalmente el CSD del contribuyente.
- Acusación por fraude fiscal: Existe la posibilidad de enfrentar cargos por fraude fiscal si se detecta alguna irregularidad en la declaración.
- Multas adicionales: Las multas por infracciones fiscales pueden oscilar entre los 4 mil y los 14 mil pesos, dependiendo de la gravedad de la situación.
- Auditorías fiscales: El SAT puede llevar a cabo auditorías para investigar a fondo la situación fiscal del contribuyente.
Es importante destacar que la declaración anual en ceros solo puede presentarse en un máximo de dos ocasiones. Además, es fundamental respaldar esta situación con documentación y justificaciones adicionales en caso de ser requerido por las autoridades fiscales.
